Desde hace tres años estoy casado con una abogada, que se desempeña como Juez del Trabajo en la ciudad de Caracas. Hace unos meses, me enteré que una antigua novia, que había trabajado varios años en una institución del Estado, desafortunadamente había sido despedida. Como es costumbre, inició los trámites legales para la calificación del despido ante los tribunales. El sistema informático que distribuye aleatoriamente los casos entre los cuarenta y cinco jueces laborales de la ciudad de Caracas, hizo que el caso de mi antigua novia “cayera” en el tribunal de mi actual esposa...
domingo, septiembre 23, 2007
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1 comentario:
bro, casualidad o causalidad...
ya nada me sorprende en este mundo cada vez más tocado por el polvo de las hadas...
jejejejejeje
un abrazo
J
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